Nada queda de aquella playa desierta
de esa arena cálida de huellas perdidas
ese aroma a verano y a juventud son
viejas historias que contar...
Mientras la ciudad Candil dormía
un mercedes verde de los setenta
trasnochaba en locales de moda
música funky y pantalones con pata
de elefante...noches locas
Petardas con melenas imposibles
y snobs venidos a menos reinaban
y destronaban al tiempo...
Búhos en la noche,
plástico fundido y reciclado
sábado por la noche y se sube
el telón, el gran espectáculo comienza
¿alguien da más?....
El más guapo, el más feo, la más puta
el más gay, todo era válido en las noches
de petardeo, en mis noches de ensueño...
Esas noches en las que todo era posible,
Hasta por unos momentos, conseguir ser
feliz...
